domingo, 28 de mayo de 2017

Parte II – Nuestros Aliados en la Costura


La incursión en el mundo de la costura y particularmente en lencería del hogar, donde se trabaja con piezas grandes (un esquinero matrimonial requiere manejar cortes de tela de 2,5 x 2 m), me ha permitido reconocer las bondades e importancia de la cinta métrica, de los alfileres y otros.

Cinta Métrica

La cinta métrica es un instrumento de medida, elaborada en diferentes materiales, pero que suelen ser flexibles tanto para facilitar el transporte de las mismas como para medir superficies curvas.

Hay distintos tipos de cintas métricas pero lo más comunes son las cintas sencillas de tela o plástico y las que viene como metro. En Kalu Lencería usamos un metro costurero de 3 metros de longitud porque
trabajamos con piezas grandes, sin embargo, la cinta de 1,5 metros facilita la medición de piezas pequeñas o medianas. Es importante, que al trabajar en proyecto de costura se use el mismo instrumento de medición para evitar desviaciones, a veces medio centímetro de más o de menos puede generar complicaciones. En caso de necesitar el uso de más de un instrumento diferente (regla, cinta, metro) debemos asegurarnos que estos tienen la misma referencia. He comprobado que el metro carpintero del técnico de las máquinas de coser (mi padre) tiene unos milímetros de diferencia con respecto al metro costurero que utilizo, esta pequeña diferencia sumado en varios cortes puede hacer una diferencia que luego requiere inventar un empate por ejemplo.
En la mesa de trabajo de Kalu Lencería se cuenta con un metro, una cinta métrica (además hay una cinta en cada máquina de coser), una regla y una
escuadra, todas para costureras y las cuales previamente hemos medido y comprobado que tienen la misma referencia. Recientemente, hemos incluido una regla flexible que facilita tomar las medidas en las curvas e incluso con algo de habilidad la regla mantiene la forma y la trasladamos al patrón.
Nuestra recomendación es tener a mano diferentes instrumentos de medición de distintos tamaños para facilitar la medición, pero hay que asegurarse que todos tienen la misma referencia.

Alfiler


Los alfileres son nuestros aliados siempre que estos sean de buena calidad. Los alfileres son como la extensión de nuestras manos, ya que nos ayudan a unir una o más piezas de tela y a mantenerlas en su sitio. Estas pequeñas piezas están elaboradas en general en acero con recubrimiento de níquel para evitar que se oxiden rápidamente, y existen deferentes tipos como alfileres de modista, de cabeza de perla, de fantasía, entre otros. Cada uno tiene su uso principal, sin embargo cada quien adapta el uso del alfiler según el proyecto de costura. En Kalu Lencería se usan los alfileres de modista y de cabeza de perla en diferentes tamaños y grosores. Cuando trabajamos con telas sintéticas o delicadas como seda, se prefiere usar alfileres finos porque no dejan marcas
Ahora bien, estos aliados pueden ser enemigos si los mismos están oxidados, doblados o sin filo en la punta (es decir están romos). Recientemente, compramos alfileres para reponer e incrementar el número disponible, ya que diariamente usamos muchísimos alfileres y confiada que estaba comprando en una mercería vimos unos alfileres económicos, los compramos y no revisamos, resultando que tuvimos que botar más de la mitad porque son de mala calidad, no tenían punta afilada y cuando intentamos usarlas no traspasaba la tela con facilidad y si presionas se puede ir un hilo dañando la pieza. Por eso la recomendación es revisar detalladamente la calidad de los alfileres para no pierdan tiempo ni dinero.
Por otra parte, es recomendable que los alfileres sean resguardados durante y después de su uso, es decir, cuando estamos trabajando con ellos es recomendable tener una caja (pequeña) o un alfiletero (puede ser un simple cubo de goma espuma
forrado en tela) donde se coloquen y que fácilmente podemos tomarlos para usarlos nuevamente, esto con la finalidad de evitar accidentes (los alfileres puede irse hacia las partes de la máquina de coser o pincharnos) y que se pierdan o dañen (si el alfiler se cae y lo pisamos podemos doblarlo o romper la cabeza de los mismos). Una vez terminado nuestro proyecto de costura debemos guardarlo en una caja para evitar que el ambiente los dañe. El taller de Kalu Lencería se ubica en una zona costera (rodeado de mar, lo cual es encantador) y dejar un alfiler dos o tres días sobre la mesa es prácticamente alfiler perdido por tanto es un hábito que al terminar la jornada los alfileres se guarden en sus cajas (hemos dispuesto caja para cada tamaño de alfiler).

Finalmente, en Kalu Lencería contamos con un aliado que no es muy común (o al menos no muy divulgado en las páginas de costura) en los proyectos de costura y son los clips (aquí le decimos tipo caimán). Estos clips son estupendos aliados para nosotros que trabajamos con piezas de telas grandes y nos ayudan a sujetarlas a los extremos rectos de la mesa de corte, con lo cual podemos emparejar la tela y/o hacer corte rectos que necesitamos para confeccionar nuestras piezas. También los clips nos ayudan a sujetar la cinta métrica, evitando que la cinta se mueva, cuando las medidas son grandes.  Al igual que los alfileres, los clips se deben resguardar y mantenerlos limpios para evitar que manchen o dañen la tela.



Cuéntanos ¿cuáles son tus aliados? ¿Qué recomiendas para mantenerlos en buen estado?

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